02-V-2021
Desde ayer hay un ángel más en el cielo. Pero de los buenos y auténticos. Desde ayer, quizás desde siempre, deberían volcar barricadas, deberían hacer grafitis en las nubes que pongan "Dios es negra", debería haber ángeles con alas arcoiris, fuera mierda alas de algodón, más ángeles caídos, pendencieros y borrachos, más humanos, menos pajarracos y más Martens y Bombers.
Ayer se nos fue Iratxe. No hemos estado apenas y sin embargo tengo la sensación que, como los amigos de la infancia, has dejado un vacío de los que dejan huella, como si uno al mirar al mar no pasa desapercibido que se ha partido en 2, que por un sendero lleno de Doris y Nemos, deseas paseen todos los putos ángeles pelotas y roscas y el océano se cierre sobre ellos para que entiendan la "aleatoriedad del destino", el "no era su momento pero la vida es así". Hijos de puta, olvidasteis al puto "ángel de la guarda" con que empezasteis de prácticas en el cielo. Dejáis 3 niños sin madre, una familia abandonada. Os va a caer el mar encima y vamos a soltar a Megalodon, el Kraken y una mutación de pirañas de agua salada para que entendáis que vuestra decisión ha sido una frivolidad de la que también vais a participar. Que Iratxe era de esas personas que hacían un mundo mejor, que en el cielo no os sirve de nada, que medio Romo y el mundo entero le va a echar de menos.
Iratxe siempre me leías, imagino seguirás leyéndome, no sé cuándo me tocará a mí, igual ahora como está de moda el políticamente correcto se cortan un poco, pero no te preocupes porque parece que a todos los que intentamos rehacer nuestra vida nos tienen enfilados. Putos meapilas, tenemos derecho a ser felices aquí también, no es incompatible ser una gran persona y ser feliz, se puede hacer un mundo mejor y dad por hecho que cuando nos toque, pelearemos por hacer un cielo mejor